Pajas por Teléfono 24 horas
¡Las Pajas por Teléfono donde el placer es total!
Pajas por Teléfono: Mis fantasías sexuales
Que si las pajas por teléfono son el recurso de los desesperados, que si te vas a quedar ciego si te tocas tanto, que si de esta forma nunca vas a encontrar pareja… he escuchado de todo, todo tipo de motivos para que no me siga haciendo pajas por teléfono, pero es que no tienen razón.
Quien todavía no se ha cascado una buena paja por teléfono no sabe lo que se pierde y mucho menos puede darme lecciones de moral.
Índice de Contenidos:
Hacer una llamada, pedir hablar con un perfil de chica determinado y empezar a masturbarse es lo mejor que hay en el mundo. Bueno, no mejor que el hecho de acostarse con una mujer de verdad, pero es una actividad que no debe considerarse como un sustituto de tu vida sexual física, sino como un complemento.
¿Quieres que te cuente como me hago pajas por teléfono?
Si hay algo que me gusta más que hacerme pajas por teléfono es contar como me las hago:
Me gusta que el placer dure lo máximo posible, aunque es cierto que a veces me paso y me lo pierdo. Me gusta no tocarme hasta que no puedo más, por lo que pido que las mujeres sean lo más detallistas posible sobre lo que ven, sobre como son y sobre lo que llevan puesto.
Agito, me imagino que las cabalgo, que me corro en sus espaldas, que las domino a mi voluntad. Termino cuando quiero, como me da la gana, sin dar explicaciones.
Y luego en la vida real no soy nadie.
Pajéate por teléfono: Principales ventajas de hacerse una paja por teléfono
Los hombres y las mujeres lo hacen, todos nos masturbamos. Sin embargo, puede ser aburrido hacerlo viendo porno en Internet; aunque si bien es cierto que la variedad no acaba nunca, cada cierto tiempo necesitamos de un poco de contacto humano.
Si no tenemos a nadie con quien follar, y no nos apetece pagar por ello, siempre tenemos la opción de hacernos una paja por teléfono. Las agencias telefónicas de líneas eróticas venden este servicio con la frase de pajéate por teléfono, con la que atraen a una gran cantidad de clientes.
¿Todavía no lo has probado? Sigue leyendo, ya que lo que te vamos a decir te interesa.
¿Por qué deberías de hacerte pajas por teléfono?
- Conocimiento: Permite conocer mejor nuestro cuerpo y nuestros gustos. Es posible que descubramos una experiencia nueva que nos llene más que ninguna otra. Si no lo probamos, no sabemos hasta qué punto nos puede llegar a gustar.
- Mejora la sexualidad en pareja: Las mujeres que están al otro lado te dirán una larga serie de guarradas que pueden ser muy estimulantes. Puede que no te guste este lenguaje lascivo, pero que le termines cogiendo el punto. Muchos clientes, una vez que han probado el servicio, se auto-descubren, conociendo increíbles experiencia que nunca antes habían creído posibles.
- Naturalidad: Nos puede servir para disfrutar de la sexualidad con mayor naturalidad, sin complejos ni tabúes.
- Relajación: Podemos usar la masturbación para eliminar tensiones del día a día y relajarnos. Por ejemplo, en el caso de que tengamos problemas para conciliar el sueño (de insomnio), podemos cascarnos una buena paja y olvidarnos de todo.
Además, este tipo de práctica se puede hacer sólo, cómo en pareja, lo que puede mejorar la relación.
¿Cómo hacerse pajas telefónicas ó pajas por teléfono?
Las pajas telefónicas son un tipo de recurso que nos ayudará a pasar en grande cuando más agobiados estemos. Cómo su propio nombre indica, son pajas que se hacen por teléfono. Esto no quiere decir que nos la vayan a hacer otras personas, pero podemos entrar en un estado tal que será como si estuviéramos en otro lugar en el que si que nos la haría una tía potente.
Cómo esto ha podido quedar un poco confuso, vamos a profundizar en ello.
¿En qué consisten las pajas telefónicas?
La idea de las pajas telefónicas se basan en hacer una llamada a un servicio de sexo en el que nos van a decir todo tipo de guarradas. Dependiendo del servicio en cuestión, podremos elegir a la tía con la que vamos a hablar; por ejemplo, podremos elegir a una rubia tetona, a una morena con el pecho natural, a una gorda, o cualquier otro fetiche que tengamos en mente. Incluso también podremos probar con otros servicios como de homosexuales, de travelos, de relatos eróticos y mucho más.
Las mujeres que se encuentran al otro lado del teléfono saben cómo ponernos a tono; esto quiere decir que nos ayudarán a entrar en nuevos mundos de excitación y de erotismo que nos pondrán la polla a punto de estallar. Cómo no podemos ver, nuestra imaginación se acentuará, recreando en nuestra mente todo lo que esa mujer nos está diciendo a través del aparato. Puede que la primera vez nos cueste… pero más adelante lograremos entrar en un estado de ensoñación que nos llevará realmente al lugar que nos están describiendo.
Lo mejor de todo es que nosotros tendremos el control de las pajas telefónicas, pudiendo decidir el momento en el que nos las vamos a hacer, además de si seguimos o no adelante con nuestro proyecto.
Las pajas por teléfono pueden ser ese recurso que nos hace falta para desconectar de nuestro día a día, para no pensar en todos nuestros problemas y ponernos a disfrutar, aunque solo sea durante un ratito. Pruébalas y notarás la diferencia en cuanto a estrés se refiere.
Paja x teléfono
Así es como conocí la existencia de este servicio. Un buen día, un domingo por la tarde, me vibró el móvil. No hubiera sido importante de no ser porque la vibración respondía a un SMS de texto y es muy raro que hoy en día se reciba mensajes si no es para activar un servicio.
El SMS tan solo decía: paja x teléfono y, a continuación, indicaba un número.
¿Qué por qué lo marqué? ¿Qué por qué no pensé que podría tratare de una estafa? Supongo que porque llevaba mucho tiempo sin darle a la casaca de matraca y eso se acaba notando.
Sin embargo, no fue ninguna estaba.
Mi experiencia con la paja x teléfono
Creo que nunca en mi vida he descargado una cantidad semejante de semen.
No se ni como empezar a describir mi experiencia de paja por teléfono. Solo se que antes de darme cuenta me encontraba al lado de la chica (no realmente, pero su descripción era la puntera que es como si hubiera hecho un viaje astral a su vera).
Dios como me corrí. Ya no solo era las cosas que me decía, si no el como las decía. Es toque de inocencia entremezclado con picardía en su voz era un coctel mortal, un popurrí de ingredientes que me trasladaba a nuevos planos de placer, a vivir una experiencia irrepetible.
No duré mucho, lo reconozco, pero tampoco es que importase demasiado. Aquí lo importante es que disfrute yo, que soy el que paga.
Paja tlf
Antes de que Internet estuviese en la casa de todos, tuve una experiencia con el sexo a través del teléfono que no me dejó indiferente.
Recuerdo por aquel entonces vivía en casa de mis padres y en ese momento estaba leyendo una revista. Como era habitual dada mi juventud, aproveché que nadie me observaba para acudir directamente a la sección de contactos, y allí encontré un servicio de paja tlf.
Pensé que sería una buena opción para hacerlo, y no llegué a la conclusión de que si hacía la llamada por teléfono fijo era posible que me pillaran.
Cómo llegué al orgasmo con las pajas por teléfono
Hice la llamada y esperé pacientemente a que me atendiesen. No serían más de 2 minutos, pero a mí se me hicieron horas. Una tal Mamerta (o algo así me dijo), empezó a explicarme cómo funcionaba la paja tlf y lo primero que tenía que hacer es elegir un tipo de chica.
Y como siempre me han pirrado las rubias tetonas, no tardé mucho tiempo en ese tiempo de la historia, no en otros.
La mujer del otro lado empezó a decirme guarradas que, hoy por hoy, todavía no me ha dicho ninguna chica. Que si las tenía como balones de playa, que si estaba muy mojadita, que si estaba metiéndose los dedos por no sé dónde.
Creo que ese día batí el récord de tiempo en correrme tardando menos de un minuto
Cuando mi padre vio la factura del teléfono no se rio tanto.
Paja por tlf
Nunca había pensado que el sexo telefónico tuviese el poder de salvar una relación. Por ello, en el momento en el que lo hizo, me quedé con la boca abierta.
Hasta entonces tan solo había escuchado hablar de fondo de la paja por tlf y siempre pensé que sería un tipo de servicio para depravados, para salidos que no tenían ningún contacto con una humana de verdad.
Hace algunos años conocí a la que más delante sería la madre de mis hijos, con la que compartí prácticamente todo… tanto lo bueno, como lo malo.
La monotonía fue el donante y el tiempo nuestro verdugo. La relación iba de mal en peor y el poco tiempo que teníamos nos lo robaba las obligaciones propias de progenitores.
Estábamos cansados, aburridos, y necesitábamos encontrar una manera de prender de nuevo la chispa de pareja.
Entonces fue cuando ocurrió: ella me comentó que le parecería buena idea probar con una paja por tlf. Le habían hablado del sexo telefónico como una especie de bálsamo divino que podría ser la solución a nuestros problemas. Y si, me decidí a probarlo: total, la cosa no podría ir peor ya.
Nos fuimos a casas diferentes y nos empezamos a llamar. Ropa caliente, conversación tórrida y la completa libertad de hacer lo que nos diese la gana.
Y si, la paja por tlf funcionó: quedamos tan calientes que tuvimos que rematar en físico, y así es como llegó otro niño de la familia.
Siempre que volvemos a aburrirnos no dudamos en coger el teléfono.